lunes, 1 de diciembre de 2008


Las tasas más elevadas de depresión están en nuestro país

Vivir o no vivir, he ahí el dilema

Camila Silva tiene 22 años de edad y está internada en la Clínica Oriente de Salud Mental Integral de Antofagasta debido a un cuadro de depresión severa, provocada principalmente por situaciones familiares

Por: Olga Valencia R.




Son las 6 de la tarde en el patio de la Clínica Oriente de Salud Mental Integral de Antofagasta y se encuentra cubierto por personas que van a visitar a sus seres queridos, pacientes internos por diferentes problemas mentales. Camila es una de ellas y cuenta como ha sido su estadía en la clínica padeciendo un cuadro severo de depresión.

“Un día tenía mucha pena y siempre tuve miedo de hacer algo contra mi vida, en esa situación colapsé, traté de quitarme la vida tomando pastillas, lo cual no resultó porque eran muy pocas, estuve tres días sin conocimiento con la boca seca, deshidratada. Mi mamá llamó a un médico a la casa y me puso suero, después me trajo a urgencia psiquiátrica y el doctor me internó inmediatamente”, expresa Camila.

Actualmente la depresión inunda a la sociedad por muchas razones, las cuales no están ajenas al diario vivir ni al entorno en el que se habita. La región ha pasado por varios casos de suicidios que, en su gran mayoría, corresponden a jóvenes. Un estudio realizado por la Universidad Católica de Chile dio a conocer que la mayor parte de suicidios en el país está entre jóvenes de 20 a 24 años de edad y las causas son por depresión debido a problemas académicos, amorosos y en algunos casos por bullying.

Esta joven de veintidós años carece de una figura paterna y además de estudiar también trabajaba. Su madre quien era su gran apoyo, se fue a vivir a Tocopilla y la dejó sola a cargo de sus dos hermanos más pequeños: Simón (18) e Ignacio (9). La única ayuda que ella tenía era “su Nona” como le dice ella a su abuela Ana (75), pero también tuvo que viajar a Valparaíso por un posible cáncer al estómago, “mi mamá no era el apoyo que yo esperaba, no pude con todo, me sentía demasiado vulnerable y la enfermedad de mi Nona fue como la gota que rebalsó el vaso”, comenta Camila.

Llegó a la clínica el 13 de octubre y hoy está a punto de cumplir 2 meses de hospitalización, expresa que su estadía no ha sido del todo buena. “Lo único que ha hecho el psiquiatra es cambiarme los medicamentos y la psicóloga no ha sido lo que yo esperaba, pienso que me faltan herramientas para enfrentar los problemas. El viernes voy a salir por el día y tengo mucho miedo, aquí es una burbuja, no tienes responsabilidades”.

La clínica es un ente privado cuyo propósito es entregar atención integral en salud mental de la más alta calidad a usuarios y comunidad. “Contamos con psicólogos y psiquiatras de alto nivel, además de la tecnología de los electroencefalógrafos, los cuales ayudan a investigar la actividad cerebral con mayor exactitud y así proporcionar mejoras a nuestros pacientes”, explica el doctor Juan Carlos Méndez, psiquiatra y director de la clínica.

La realidad de estas instituciones, tanto de la clínica oriente como del psiquiátrico del hospital regional, son muy diferentes ya que la gran mayoría de los pacientes en el hospital son crónicos y pueden estar toda una vida ahí, la población es diferente y los recursos no son muchos; en la clínica cuentan con muchos más recursos por ser una institución privada y los pacientes solamente tienen estadías cortas o medianas, “apenas muestran mejorías suficientes se les da el alta. Lo bueno es que siempre son mejorías, nunca hemos tenido un suicidio dentro de la clínica y espero que nunca pase algo así”, comenta el Dr. Méndez.

Camila por su parte dice que nunca en su vida se le había cruzado por la cabeza cometer un acto suicida. Al primer mes de internada salió con permiso por el día y tuvo una recaída horrible. Volvió a tomar medicamentos pero esta vez fue mucho más que la anterior. “Me desubiqué completamente, creo que tomé más de 40 pastillas, me llevaron al hospital militar para hacerme un lavado de estómago, aquí llegué nuevamente en camilla y amarrada”, expresa con una mirada perdida y gran pesar en su interior.

Virginia (43), su madre, dice que “Camilita” siempre ha presentado cuadros depresivos. “Son trancas que trae desde niña, creo que el hecho de no tener una figura paterna ha repercutido ahora en sus decisiones como mujer”. Además se siente muy apenada por no estar a su lado. El estar viviendo en otra ciudad y no estar con ella todos los días en los horarios de visita la hacen sentir responsable de que su hija esté internada en una clínica psiquiátrica.

Al día siguiente Camila estaba acompañada por sus amigos de infancia y esbozaba sonrisas y carcajadas, dice que sentir el apoyo de los infaltables amigos la ayudan a sentirse viva y sus ganas para salir de ese lugar se hacen más grandes aún. “Tengo ganas de volver a estudiar otra cosa, ir a vivir a Viña del Mar, cambiar de aire porque creo que eso me hace falta” agrega animosa.

Los jóvenes son una parte importante de la población en una nación y también son más vulnerables a los cambios. Chile es uno de los países con las tasas más altas de depresión juvenil y éstas aparecen debido a diferentes factores que agobian a la sociedad. En el caso de Camila la responsabilidad extra como el ocuparse de su casa y hermanos era demasiado, no pudo más y sus ganas de morir afloraron de una manera inesperada. Ahora encontrándose internada en una “clínica de locos” como ella le llama, piensa que su única alternativa es salir adelante por sus propios medio, “las pastillas ya me tienen harta, aparte quiero estar fuera y lúcida para mi cumpleaños que es en dos semanas más y celebrarlo como se merece”, señala riendo y con un brillo en sus ojos llenos de esperanza.

2 comentarios:

Somos los de Informativo 2008 dijo...

Olguita marina, tu crónica la he leído como ocho veces, no me preguntes porqué... jajajaja. Me impactó al principio, creo que acercarse a fuentes directas para indagar acerca de temas tan delicados como el tuyo, es digno de reconocimiento, así que sólo me limitaré a decir que está buena, bonita e interesante. Lo otro te lo digo más rato.

Un beso,
María Luisa

Somos los de Informativo 2008 dijo...

Holi Olga XD
Encontre super interesante tu tema; tiene enganche y habla sobra algo super delicado, que está afectando a muchos, sobre todo los jóvenes.
Un 7.0 xD

Melissa Osorio. :)