lunes, 29 de diciembre de 2008

"El bullying más allá de un fenómeno intraescolar"

Liceos prefieren ocultar sus propios casos para no perder prestigio

El bullying más allá de una fenómeno intraescolar


Antofagasta es una ciudad que, efectivamente, durante este año ha sido víctima de Bullying, ya sea por parte de compañeros de colegio a otros, como también de los propios alumnos a sus profesores o viceversa, por lo tanto, el departamento de educación está implementando una política sobre como evadir estas actitudes agresivas que nacen de los estudiantes, pero realmente éstas, ¿están relacionadas con el origen del problema?

Por Daniela Araya

Faltan cinco para la una y el portón del Liceo Andrés Sabella (B-29) se abre de par en par, Evelyn Pizarro hace una señal a su hijo Vicente para que se acerque y puedan dirigirse a su casa que queda unas cuadras del establecimiento, cuando él se acerca, ella toma su mano y le pregunta cómo le fue, el niño mirando hacía el piso, con un tono frío y cortante responde que le fue bien, ella sigue caminando, pero ésta vez lo hace más rápido y con una expresión en su rostro de preocupación ante la tajante respuesta de su pequeño hijo de 10 años.


Evelyn es madre de uno de los últimos casos de bullying que se están tratando en el Liceo B-29, ya que su hijo presenta claras actitudes de estar siendo afectado por éste fenómeno. Jorge Tapia, director del establecimiento dice, “desde hace tres años trabajamos con un equipo psicosocioeducacional, el cual se encarga de la detección temprana de casos de bullying, evitando así, que una situación como la de Vicente pase a mayores, por lo tanto, como ya tenemos la experiencia, al notar indicadores como la soledad o poca relación con sus otros compañeros, nos podemos dar cuenta de cuales son los niños afectados, y con ello inmediatamente se habla con sus apoderados y los mismos alumnos para encontrar la solución al problema”.


El jefe del departamento de educación de la secretaría ministerial de la Región de Antofagasta, Eduardo Videla, lo llama “Medidas para evitar el Bullying”, una política del departamento de educación, que consiste en la realización de programas directos con los colegios, es decir un trabajo con toda la comunidad organizada de los establecimientos, además de un trabajo con los estudiantes que consiste en elegir un representante por establecimiento para que asista a diversas charlas sobre como evadir el bullying, ya que no se puede llegar masivamente a todos, y luego lleven esta información a la comunidad escolar para que ésta se masifique entre el personal y se practique la solución pacifica de conflictos.


Sin embargo, Tapia explica que las medidas que expone el ministerio se dieron a conocer muy tarde, cuando el problema ya estaba ramificado, por lo tanto no son suficientes, además, ésta situación se debe atacar desde su raíz, manteniendo un constante trabajo con los apoderados aparte de el personal del establecimiento, porque éstas actitudes vienen desde el hogar, ya que es el principal centro educador de los niños y en el colegio no se les enseña a ser agresivos y tampoco a resolver sus conflictos agrediéndose verbal y físicamente.


Al igual que el director del Liceo Andrés Sabella, la psicóloga Francis Morales Rivera argumenta que éstas actitudes agresivas se deben a la mala enseñanza que se entrega en el hogar sobre como socializar en cuanto a la resolución de conflictos, lo que está relacionado directamente con patrones culturales que están en la base de los niños, como sus relaciones familiares y su entorno social, lo que influye en los menores sobre la forma de solucionar sus problemas y esto se genera primordialmente en las primeras etapas de la vida de un ser humano.


LA ROPA SUCIA SE LAVA EN CASA


Según las estadísticas que conserva el Ministerio de Educación (MINEDUC) de la región, este fenómeno no se da con gran amplitud en la ciudad, por lo tanto no existe un gran número de casos registrados sobre bullying, pero esto se debe a que los apoderados acuden a carabineros para denunciar directamente éstas agresiones, ya que dentro de los colegios no se hace nada. Además, a los niños acusados por practicar el bullying no se les da ningún tipo de castigo, más bien el establecimiento se encarga de ocultar éstas situaciones prometiendo que a futuro tomarán medidas, como el dicho “los trapos sucios se lavan en casa” para que el colegio no pierda prestigio, pero esto nunca se cumple, dice Claudia Torres, apoderada del Liceo de niñas de Antofagasta.


María Cristina García, directora del Liceo Marta Narea Díaz explica que hoy, dentro del establecimiento, éste fenómeno no se ha dado en gran número, sin embargo, siempre ha estado presente dentro de las relaciones de los alumnos pero ahora se le ha dado una connotación demasiado amplía. “El bullying siempre ha existido, lo que pasa es que en este momento, por los medios de comunicación, como es el famoso youtube, le hemos dado una importancia demasiado relevante, lo que, en mi opinión, no debería ser así, generando que ahora, si un niño toca a otro de una forma más allá de lo que uno espera, significa bullying”, dice.


Evelyn mira desde lejos la puerta de la pieza de Vicente que permanece cerrada mientras él se encuentra adentro, luego comenta que quizás esto sea una consecuencia de la decisión de su padre sobre abandonar su hogar desde hace casi un año y medio. “La situación me agobia, a veces pienso que es mi culpa, él era un niño muy activo hasta que Mario se fue de la casa y luego, de un momento a otro, Vicente comenzó a actuar así, ahora todo depende de los pronósticos que me entregan en el liceo, yo sólo quiero que me devuelvan a mi Vicente lleno de sonrisas que tenía hace un año” explica.

1 comentario:

Unknown dijo...

Apropiación de estilo: 2
Calidad de la narración: 4
Aplicación de conceptos: 4
Idoneidad de las fuentes: 4
Valor Informativo: 4
Momento de la historia: 4
Corrección ortográfica y redacción: 2
Total: 24/28
Nota: 6.0