Cuando se rompe el condón

Dificultades para obtener la “Postinor 2” ponen en jaque a jóvenes antofagastinas.

Cuando se rompe el condón

En abril de este año, el Tribunal Constitucional decidió prohibir la “píldora del día después”. Sin embargo, es posible obtenerla gratuitamente en Antofagasta, pero aquello no significa que resulte fácil. Entre humillaciones y discriminación, se paga muy caro el derecho de llevar a la práctica la canción “hoy es noche de sexo”.

Por Cristian Reyes Herrera.

Una noche de pasión fugaz, alcohol, dar rienda suelta a los instintos del placer y sentirse totalmente dueña del derecho a hacer con su cuerpo lo que se le antoje, como tantas otras veces. Luego del clímax, estupefacta, Carla siente que esta vez fue diferente a las anteriores: Un condón roto es la evidencia de que algo en su vida va a cambiar…y para siempre.

“Cuando me di cuenta pensé: no todo está perdido, hay una pastillita que me puede salvar”, recuerda Carla con el rostro compungido. Su pareja de aquella noche distaba de ser alguien con quién proyectarse a futuro. Podían compartir carrete, sexo, vivencias, fumar algún ‘cañito’. Pero formar una familia era algo que jamás pensaron asumir en aquel entonces, ni tampoco ahora.

Decidida parte al día siguiente rumbo al Hospital Regional de Antofagasta, sin sospechar que era apenas el inicio de su calvario. Llena de rubor, debe relatar su historia a la funcionaria tras el mesón y de paso, a los varios curiosos que realizaban comentarios a hurtadillas mientras esperaba su turno de atención. No soportó más la humillación y decidió irse.

“Me trataban como a una puta, especialmente algunas señoras que movían la cabeza diciendo ‘las niñitas de hoy’... ¿a ellas no les gustará tener sexo acaso?”, dice Carla, ahora con rabia. Su última opción era acudir a una farmacia y pasar un nuevo bochorno, pues no contaba con una receta médica para adquirir el medicamento. “Tenía que sacar un bono y no tenía plata…al final pensé que estaba haciendo mucho atao, que a lo mejor ni estaba embarazada”, señala.

Sus esperanzas acabaron un mes más tarde. Un test de embarazo positivo marcó el inicio de un giro radical en su vida. “Quería morir, obviamente él no se hizo cargo, me ofreció plata para abortar”, recuerda.

Chile entre los ‘top five’ de la restrictividad sexual.

Un grupo de diputados de la “Alianza por Chile” presentaron un requerimiento al Tribunal Constitucional para impedir la distribución de la píldora del día después por considerarla abortiva. En un fallo dividido, el Tribunal Constitucional decidió acoger la petición de los parlamentarios, convirtiendo a Chile en uno de los 5 países del mundo que prohíben el Levonorgestrel (componente activo de la Postinor 2), además de Filipinas, Ecuador, Costa Rica y Uganda. La píldora, sin embargo, pudo seguir siendo comercializada en farmacias (donde se vende como ‘Optinor’) y distribuida en consultorios de acuerdo al criterio de los respectivos alcaldes.

En el caso de Antofagasta, el alcalde Daniel Adaro se mostró contrario a la ‘pastilla del día después’, aunque prefirió someter la decisión de su distribución al consejo municipal, que optó por entregarla. Pero a pesar de estar permitida, no resulta simple obtenerla. De acuerdo a lo señalado por el seremi de salud de Antofagasta, Dr. Enrique Castro, “corresponde a una decisión ética del profesional tratante”, quién debe evaluar la situación de la mujer que requiera la pastilla y entregarla a los casos más idóneos, como las violaciones, en las cuales debe presentarse un parte policial.

En tanto, respecto a la falta de privacidad para las mujeres afectadas a la hora de requerir la Postinor 2, el director del Hospital Regional de Antofagasta, Dr. Zamir Nayar, considera que se trata de hechos puntuales lamentables, además de destacar que se están realizando importantes avances en cuanto a infraestructura del servicio hospitalario, como la reciente inauguración de la Unidad de Hemodinamia, de calidad internacional, el 28 de noviembre último.

Anuncian aumento de abortos clandestinos.

Mientras se hacían masivas las protestas de mujeres y hombres en contra de la prohibición de la Postinor 2, el doctor Ramiro Molina, director del Centro de Medicina Reproductiva de la Universidad de Chile, en conjunto con el Dr. Giorgio Solimano, publicaron un estudio señalando que la cifra de abortos clandestinos podría ser ahora de unos 280.000 anuales, el 20% de ellos con complicaciones.

Carla estuvo a punto de pasar a engrosar aquella cifra. Problemas con sus padres y una fuerte depresión, sumada a la rabia de no poder evitar su difícil destino con una pastilla, la hicieron aceptar el dinero que su compañero de desliz le entregó para abortar. Pero se arrepintió. “Me di cuenta que era muy peligroso. Podía morir ahí mismo, ¿cómo saber si es realmente un doctor quién te atiende? Como aquí está prohibido, se hace todo muy turbio”, cuestiona.

A sus 5 meses de embarazo aún no opta por un nombre para su futura hija. Tampoco tiene claro cómo enfrentar lo que viene. Sólo sabe que como a miles de madres solteras, el dinero no le sobrará tanto como los problemas. El "pelambre" en la familia y conocidos es algo que ya aprendió a soportar. Mientras tanto sus ojos, conteniendo las lágrimas, se llenan de esperanza cuando dice: “por mi hija haré lo que sea, aperraré hasta el final, sé que solas contra el mundo saldremos adelante…va a ser difícil, pero aquí estamos, vivas”.

Minutos después que Carla saliera de su control médico, una pequeña joven, entre titubeos y temores, se acerca al mesón de recepción del servicio de urgencia del Hospital Regional de Antofagasta. Un nuevo ciclo acaba de comenzar.



Paralelo 2