miércoles, 3 de diciembre de 2008

La travesía de los empleados públicos



Hace ya casi un mes los funcionarios públicos del país comenzaron las manifestaciones al estar en desacuerdo con el Gobierno que los lidera.
No querían que su labor fuera menospreciada y reclaman algo que para ellos es justo. Con estos pensamientos las movilizaciones por parte de la ANEF (Agrupación Nacional de Empleados Fiscales) dieron sus primeros signos de ser un hecho.
Así es como comienza esta problemática que afecta a la clase trabajadora, quienes ocupan como escenario las calles de Chile para hacerse escuchar.




Por Franco Talamilla Segovia.
Es casi la hora de almuerzo, atenta al reloj la profesora Lilian Montecinos da un “hasta luego alumnos” a quienes ella da clases, un curso de tercero básico quienes ven a esta profesora como una segunda madre de quien se despiden con un cariñoso beso.
Se sienta en su escritorio y comienza a explicar lo difícil de la profesión y la vocación que hay que tener para ejercerla. “Con cada cosa en la vida vienen cosas que te desmotivan, para mis colegas y para mi, el gobierno es quien cumple esa función”, explica con un tono de cierta resignación.

La movilizaciones del sector público el pasado 12 de noviembre se vieron mayoritariamente apoyadas por el gremio educacional, esto se debió a que, en junio del 2008 otra manifestación por parte del gremio de profesores, se llevó a cabo para regularizar la situación de la LOCE y los bajos sueldos que el Gobierno otorgaba al trabajador educacional fiscal.
Luego de toda la revuelta de este primer paro por parte de profesores, los resultados era lo que más importaba.

El dirigente del Colegio de Profesores, Rodolfo Alfaro, es quien lleva el peso en sus hombros. “Tomamos tantos riesgos, nos manifestamos, gritamos y hasta cantamos en la movilización de la plaza Colón el pasado junio, todo para nada”, relata Rodolfo Alfaro.
Sin respuestas del gobierno ante sus quejas, noviembre aparece con un aire esperanzador para los fiscales y más aun para los profesores quienes ya se habían manifestado y no habían sido escuchados.

El 12 de noviembre de 2008 las movilizaciones toman parte en todo el país y claramente también en Antofagasta y la ANEF es el protagonista afectado. Ese fue el día en que ningún funcionario público trabajó para unirse a estas manifestaciones. Lilian Montecinos, profesora de la escuela E-87 “Las Rocas” y José Romero, profesor del Liceo Andrés Sabella, se ubican bajo el sol primaveral a las 12 del día para ser escuchados junto a otros centenares de funcionarios del área publica. José Romero, recuerda el día como uno de esos en que vale la pena soportar el calor, además del sacrificio de poner a la ética profesional como prioridad en lugar de pasar tiempo con su familia. “Teníamos que estar ahí, era por una excelente causa y sería poco ético no haber participado y recibir los beneficios que logramos”, explica José Romero.


PROS Y CONTRAS
Lilian Montecinos, compara la situación educacional con una cuerda floja, debido a la inestabilidad en que se encuentran, ya que muchos de sus colegas son jefes(as) de hogar (se incluye) y el trabajo en escuelas es lo único que sustenta el pan de cada día. Es por esta razón que debían aprovechar esta instancia del paro de la ANEF para concretar lo que no lograron, en una primera instancia actuando solos, como gremio educacional.

Las escuelas, liceos municipales y todo el sector público, al actuar de manera colectiva y todos en un solo sentir, tenían claro las consecuencias de este paro, pero son ellos mismos quienes deciden arriesgarse. En el caso del sector educacional las consecuencias son más variadas, ya que son los únicos que deben cumplir horas trabajadas las que se deben recuperar, debido a que se rigen por una reforma educacional otorgada por el ministerio de educación, la cual no se puede doblegar.

“Sabíamos a lo que íbamos, era claro que teníamos que recuperar las clases que no se impartieron”, dice la profesora Montecinos. Es así como luego del paro los pofesores públicos retoman sus actividades y ante la recuperación de clases en días sábados (todo el día), se ven entre la espada y la pared.
“Si no recuperábamos las clases, nos descontarían los días no trabajados de nuestro salario”, explica José Romero, quien también debe recuperar clases por haber sido partícipe del paro nacional.

No todo puede ser tan malo, gracias a las movilizaciones fue logrado un reajuste del 10% al sueldo del sector público, que si bien no son cifras millonarias, ayudará a pasar con menos temor las deudas de estas festividades que cada vez están más próximas.

Además, lo que todos están esperando, es el prometido “bono de término de conflicto” el cual se les debe otorgar a todos los partícipes del paro por volver a sus actividades laborales cotidianas, el cual tiene una cifra de $200.000 a cada empleador público.
El dirigente del Colegio de Profesores, Rodolfo Alfaro, se muestra conforme con los resultados logrados, ya que, al recordar la primera instancia del paro de profesores en junio de 2008, su cara cambia radicalmente al tener en cuenta que el gobierno no quiso escucharlos.

Es así como el cuerpo educacional docente recuerda estas movilizaciones, en las que debieron soportar malos ratos, el calor insoportable, horas estando de pié, sin mencionar la desesperación y el estrés que los profesores vivieron antes de que el paro se llevara a cabo debido a su precaria situación en cuanto a bajos sueldos y poca valoración de su labor trabajadora.
Ahora es cuando la respiración se calma y el sector público regulariza sus actividades laborales. En el caso de los profesores, es mejor el trabajo que se efectúa luego haber conseguido algo tan esperado, sin que los factores de injusticia afecten a la vocación educacional con la que cuentan estos profesionales de la educación.


3 comentarios:

Somos los de Informativo 2008 dijo...

Creo que a los profesores les encuentro razón, sobre todo por que en este país es una profesión poco valorada, con todos los sacrificios que respecta esta.
Tengo una tía que es profesora de Inglés en un liceo y los tratos que recibe no son de lo mejor por parte del alumnado; y ni hablar de las remuneraciones.
Pero por otro lado, por ejemplo, los trabajadores del registro civil, creo que no es justo con ellos por que el trato que les dan a las personas no es de lo mejor; las largas colas, y a veces lo despectivo de su carácter hace pensar que no deberían estar pidiendo ese porcentaje.

Somos los de Informativo 2008 dijo...

era de Melissa Osorio.
Pd: Franco, me gusto bastante :)

rockvolucion dijo...

Me agrada mucho que no caigas en la crítica fácil que hacen los medios tradicionales, que se preocupan de los aspectos negativos de las movilizaciones para así denostarlas. Abordaste el tema como corresponde, porque detrás de esa "horda de flojos intransigentes" que quiere mostrar la televisión, hay personas comunes y corrientes como cualquiera de nosotros y al fín alguien les pregunta su parecer. Sigue así.

Cristian Reyes Herrera