De: Viejito Pascuero Para: Don Roberto con amor

Ya comienza a acercarse esta festividad tan esperada por los niños, también sinónimo de gastos y endeudamiento; Antofagasta no es la excepción.

Por Melissa Osorio

Misión

Son las 10.00 AM, y el sol antofagastino casi está en su cúspide, el calor comienza a sentirse.

El verano está a la vuelta de la esquina, y con el también la navidad.

En la villa México, barrio que se encuentra en el norte de la ciudad, cercano a la nueva y moderna plaza llamada Nicolás Tirado, vive el señor Roberto Cortés, taxista colectivo de 36 años junto con esposa Vilma.

Hoy es el día en el cual realizarán sus compras navideñas. Adelantándose para aprovechar los descuentos.

Por lo cual el viaje no lo realizarán solos, para así poder comprender cómo el alza de precios afecta a una familia de clase media modesta.
Luego de llegar al centro de la ciudad, se dirigen Mall Plaza Antofagasta, donde las decoraciones propias de estas fiestas ya hacían gala desde el mes pasado y claramente se podía observar gente actuando igual que don Roberto, buscando las mejores ofertas.

Se dirigen hacia la tienda París, específicamente el sector juguetes, donde un espacio no menor, estaba atiborrado de toda especie de muñecas, peluches, autitos, y en el aire se sentía ese clásico olor a plástico nuevo, tan característico de los regalos navideños, que a cualquiera, los recuerdos pueden invadir.

Alza

Lo que no sabe el señor Roberto es que los juguetes han subido un 5% respecto al año anterior, según Sergio González, ingeniero comercial. Esto afectaría un poco su dinero predestinado, como el de la mayoría de los chilenos. Por lo que es recomendable realizar cotizaciones y tener un presupuesto fijo.

La inflación y la naciente crisis económica que viene afectando al país no será sinónimo de falta de regalos, sino, que estos serán menos, y el viejito pascuero será uno más recatado, no tan regalón como años anteriores-expresó González.

Las compras

Don Roberto compró para sus dos hijos pequeños, dos muñecos de acción Max Steel, que realizan diferentes acciones cada uno, dos sets de autos de juguete, dos juegos de mesa, y una autopista de juguete para ambos; ya la cuenta ascendía sobre los ochenta y cinco mil pesos, y en la cara de Cortés se iba esfumando la sonrisa que poseía al principio.

Todavía faltan los regalos de su esposa, el de sus suegros y sus padres; sin contar los sobrinos ni sus hermanos, ya que le sería imposible. –Es lo que hay…ojalá se pudiese hacer más, pero como buena familia chilena, tenemos deudas, y hay que cuidar el bolsillo con la crisis que viene para el otro año, y se está olvidando lo principal de esta festividad que es pasarla en familia- señaló Vilma.

Lo más vendido

Melissa López (en la imagen), ejecutiva de venta de París expresó- Siempre, lo más vendido para las niñas en un rango de 4 a 10 años son las muñecas, en especial Barbies, que cada vez son más variadas y coloridas. Sus precios bordean entre los 5 mil hasta los veinticinco mil pesos.

Para los niños, de 4 a 10 años siguen los clásicos autos a control remoto; las motos de juguete, y también se incluyen los sets de figuritas que contienen personajes de diversas series.

Y para los bebés, los juegos didácticos con luces y sonidos de marcas como Fisher Price; pionera en juguetes para bebés, incluyendo la nueva línea Disney.

Sin contar las novedades tecnológicas como las consolas de video juego, los computadores, mp4 y celulares; estos de precios más elevados.

Una navidad mas austera

Lo que le aconteció a don Roberto y a su esposa, es lo que se verá reflejado en muchas familias chilenas; una no tan grata sorpresa al ver la cuenta final de sus compras navideñas; un alza considerable en los precios.

Esto los llevará a una disminución en las compras de regalos, adquiriendo sólo lo mas esencial que son los juguetes para los pequeños, sin tampoco abusar en exceso del bolsillo y de las cuotas.El señor Roberto se marcha a su hogar, de la mano con su esposa, planeando donde dejar los regalos para que los niños no los encuentren; con menos dinero en el bolsillo gracias a los regalos y al incremento de los precios; y por lo consecuencia, pensando en los malabares que hará para llegar hasta fin de mes; una realidad que golpea muchas puertas y que pocos están exentos.